viernes, 27 de noviembre de 2009

PRETENSION - REPULSION

Hoy recogí un pedazo de corazón del suelo, podría ser mío, de un animal quizá,
Dos cuadras más allá encontré a tu madre de rodillas rezando junto a unas fotos,ella se fue a exigir su alma a un sujeto que cantaba tangos en la calle.
Me tope con un par de sujetos que se morían de miedo y congelaban su soledad en un frasco de Codetol, no se podían mirar a los ojos y prefirieron escribir cosas en sus puertas.
Los hijos del vacío bailan canciones de cuna con ritmos apocalípticos
El se oscureció como la noche en los brazos de un santo inventado
Ella ya no puede parar de bailar mientras las nauseas atentan contra su salud, las miradas la siguen y es lo más obsceno que un baile en cadenas
Los hijos del vacío bailan canciones de cuna con ritmos apocalípticos
El parece estar en un gran momento, mas no sabe como afinar su guitarra sin los ojos de bestias que saben vestir.
Todos a su vez saben odiar, odiar la vanidad, pero no hay definiciones.
Los personajes son de caricatura y yo prefiero ser la rubia, algunos tienen afiliaciones temibles y la convicción de una política irónica.
Sus sueños algo destrozados caminan hacia una credibilidad en el ser humano casi a punto de la locura.
Los hijos del vacío bailan canciones de cuna con ritmos apocalípticos
El no sabe como guardar tantos recuerdos y prefiere quemar esa pieza del tercer piso
Hoy ella pretende contar lo que nunca dijo, pero jamás oculto, mas lo espeso de los días con un poco de dibujos hizo que sus ritmos se parecieran.
Los hijos del vacío bailan canciones de cuna con ritmos apocalípticos
Los sabores y los olores no son los mismos bajo la amenaza de muerte en una estación de metro, sin que ni siquiera sepan tu nombre.
El no sabe como escapar, se viste de hombre, de profesor, de actor, guionista quizá de asesino sería lo mejor.
El insiste en hablar de amor sin saber del abismante sin sentido de las palabras y los días que pasaron.
Los hijos del vacío bailan canciones de cuna con ritmos apocalípticos
Ellos siguen esperando quizá el cine, los viajes le den una oportunidad en la que aun ni siquiera piensan.
Los hijos del vacío bailan canciones de cuna con ritmos apocalípticos

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